Manuel Rodríguez Galán nació en Zafra el día 3 de Julio de 1943, y falleció el día 14 de noviembre del año pasado como consecuencia de una grave enfermedad. Estaba casado y tenía tres hijos. Una persona muy familiar, trabajadora, cristiana, servicial e inquieta.
Como cristiano, dentro de la Hermandad del Cristo de los Desamparados, jugó un papel destacado en la evolución, mejora y el mantenimiento de la tradición de la cofradía. En la cofradía Sacramental fue un hermano muy activo. Fue ecónomo de la Parroquia de Nuestra Señora de la Candelaria cerca de 30 años y perteneció al Consejo Parroquial.
Se ha ido una gran persona, un amigo y buen cristiano. Muy integrado en su comunidad parroquial, participando en todo lo que estaba en sus manos, pero sobre todo en su querida cofradía del Cristo de los Desamparados.
En su hermandad ha sabido desarrollar perfectamente el cargo de vicehermano mayor y adoptar decisiones importantes, pero sobre todo, ha sido un perfeccionista en su cargo de fiscal, a la hora de la salida profesional cada jueves de la Semana Santa y otros acontecimientos.
Cada año programaba el recorrido con los diferentes participantes en la procesión y los puestos que ocuparían. “Todos estábamos tranquilos de que con Manolo todo saldría perfectamente cada año”, relata Juan Piédrola.
Aunque su entrada en la cofradía se remonta al año 1.961. Será en el año 1.983 cuando entra por primera vez en la Junta tras marcharse José Luis Quintana, aunque antes fue un cofrade muy activo y con mucha iniciativa que le permitiría llegar a vicehermano mayor.
El actual hermano mayor de la hermandad, José Carlos Muñoz recuerda con gran cariño diferentes momentos. “En año 1.985 cuando se negaron a salir los costaleros contratados para sacar el paso y descolgar a nuestro Cristo de los Desamparados, los jóvenes que había en gran cantidad se ofrecieron a sacarlo».
Otro momento, tras la dimisión de hermano mayor Francisco Rodríguez en junta celebrada el 3 de diciembre de 1998, fue cuando ocupó su cargo hasta las elecciones que concluyeron el 15 de abril de 1999 . Han sido buenos momentos en reuniones de trabajo, desfiles procesionales, convivencias, etcétera.
Manuel Rodríguez participó en destacados actos en esta cofradía: la restauración del paso y del Cristo, el homenaje a los fundadores de la cofradía de los Desamparados, y las decisiones que se tomaron en su momento en las juntas de gobierno. En el año 2012, se le realizó un homenaje en el pregón de la Semana Santa de Zafra.
El vicehermano mayor también tenía importantes aficiones como la lectura y la pintura, en esta última acudía a clases que se impartían en la Universidad Popular de Zafra (UPZ). De esta forma realizó pinturas muy significativas, entre ellas la del Cristo de los Desamparados y la Inmaculada, esta última se la donó a las monjas de Santa Clara.
Siempre disfrutó con su mujer, hijos y nietos en la preparación de las procesiones e inculcó en su familia ser un buen cristiano y mejor persona. Manuel Rodríguez cuenta ya con sus sucesores en la hermandad de los Desamparados.
Manolo se fue con el deber cumplido y estamos convencido de que ya está disfrutando, junto al Cristo de los Desamparados. A buen seguro que organizará la procesión desde donde se encuentre para que nos guíe por el buen camino. Desde la Hermandad, la familia y tus amigos seguiremos disfrutando con esos buenos recuerdos. Descanse en Paz.

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